Se hace camino al andar (A. Machado)

Tenía yo una mezcla de sentimientos; cuando eso pasa por lo general tomo un lápiz y un papel, o me acerco al teclado del PC y me instalo a escribir lo que siento y pienso… pero eso, hace como una semana no me bastó. Trataba de hilar mis pensamientos de forma secuencial, que resultaran lógicos, que me permitieran desenredar la madeja que tenía en la cabeza y no podía… eran solo frases sueltas, inconexas y contradictorias que para nada me servían para entenderme…

Fue así que decidí salir a caminar. Me sentía ahogada y abrumada, un poco atrapada dentro de mi casa, o tal vez en mí. Siempre me ha gustado caminar y si es sin rumbo… mucho mejor!!!. Salí sin saber a donde, salí porque necesitaba alejarme de todo; visto de un punto de vista es algo bastante inútil porque es imposible escapar de uno mismo.

Pues bien, mi caso es diferente… caminar me relaja enormemente y a veces me vacía la mente de las preocupaciones; camino observando a mi alrededor, mirando la gente, mirando los lugares, las construcciones (es una deformación familiar, mi papá es arquitecto XD). Otras veces camino sin conectarme con nada del exterior, me pongo los audífonos y si pudiera cerraría los ojos, para concentrarme más en las voces de mi cabeza (es una forma de decir, ok? Aún no me baja la paranoia)

Yo quería salir a encontrar la calma para mantener una sincera y descarnada conversación conmigo, esa era mi intención inicial… Y no me resultó… al final terminé por caminar entre la gente, metiéndome a las iglesias (algún día les contaré mi rollo con las iglesias), mirando escaparates, tomando un café mientras leía… en fin, fue una buena evasión, una buena tregua para mi mente.

El asunto es que igualmente caminar me sirvió pero no de la forma en que lo tenía planeado… igualmente obtuve la paz necesaria para verme a mi y mis circunstancias, tal vez era demasiado pedir que se me aclarara la mente con una simple caminata de 5 horas, pero con los días llegué a las conclusiones necesarias, que de echo están plasmadas en el blog… lo mas chistoso es que salí a caminar al centro de Santiago, ese antro del stress del cual hay varios escapados por estas fechas. Créanme, eso era mejor que la ensalada mental que tenía…

Caminar es sinónimo de acción, de movimiento, de cambios, de acercamientos y de alejamientos… y eso necesitaba yo. Caminar como una metáfora de ser dueña de mis pasos y por ende de mi persona.